martes, 6 de noviembre de 2012

El monumento más importante de Zaragoza es, sin duda, la Basílica del Pilar, auténtico símbolo de la ciudad que cada año es visitado por miles de peregrinos...

En la madrugada del día 3 de agosto de 1936, un avión de las fuerzas aéreas republicanas, lanzó tres bombas sobre la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, bombas que no estallaron, a pesar de que su espoleta funcionaba correctamente.
El milagro de Nuestra Señora del Pilar

Pasadas las 2 de la madrugada del día 3 de agosto de 1936, se oyó el zumbido de los motores de un avión, algo poco frecuente hasta entonces, sobre todo a estas horas. El avión volaba bajo, a unos 150 m, y al no disponer en aquel barrio de defensas antiaéreas, el Fokker rojo dio unas pasadas, rozando las torres del Pilar.

El avión lanzó tres bombas sobre la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, pero ninguna hizo explosión. Una de ellas se clavó en la calle, a unos pasos del templo, y después de levantar unos adoquines dejaron en el pavimento la silueta de una cruz.

Otros dos artefactos cayeron sobre la Basílica, una atravesó el techo dando en un nervio de la bóveda de descarga de la cúpula de la Santa Capilla, como puede comprobarse hoy a simple vista. La otra cayó en el mismo marco dorado del mural de Goya en el Coreto y la perforación también es visible en su lateral derecho. Los daños causados fueron más de índole artísticos que materiales, ya que los artefactos tampoco llegaron a explosionar. 

Una de las bombas que traspasaron el techo del templo fue desmontada por artificieros del Regimiento de Zapadores de la 5ª División y un equipo técnico de Maquinista y Fundiciones del Ebro, a cuyo frente estaba el ingeniero Miguel Elizalde Biada, sacó un croquis de las piezas y procedió a su fabricación como recuerdo, teniendo un gran éxito de ventas en Zaragoza.

Este hecho del bombardeo, provocó una oleada de indignación y animó tanto la resistencia de Zaragoza, porque pensaron que Dios los estaba ayudando desde arriba. Un auténtico milagro.

La Iglesia jamás ha considerado un milagro el hecho de que las bombas no explotaran.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario