Tama era un gato callejero, que se movía por la estación ferroviaria de Kishi, que demostraba
un gusto especial por observar cómo entraban y salían los pasajeros, que las autoridades de la prefectura de Wakayama decidieron un día
convertirlo en jefe honorífico de la estación.
Salvó de la quiebra a una estación de tren
Kinokawa, lugar donde se encuentra está estación, no tiene nada interesante que ofrecer al público, razón por la cuál era una zona poco transitada, tanto que la compañía Nankai Electric Railway, decidió cerrar la estación de aquel lugar, lo que paso a afectar a los residentes de la zona. ¿que sucedió?
Tres años después de que cerrará la estación Kishi, se les ocurrió una idea. Nombrarían a Tama (una gata callejera), para que fuera jefa de la estación. Y funcionó, a partir del 2007, Tama fue adquiriendo fama haciendo que incrementara el numero de visitantes a la zona.
La sensación del lugar es esta gatita, que trabaja durmiendo en su oficina (una cabina de tiquetes) con un salario de suministro ilimitado de comida de gatos. Aunque descansa el fin de semana, días en que Nitama (otra gatita) cubre sus turnos.
Por su parte los visitantes, en su mayoría menores de 12 años, buscan tomarse una foto con la jefa de la estación Kishi que ahora, cuenta con tres adorables trenes temáticos: el Tren Fresa, el tren Tama y el Tren Juguete.
Y bien que han sabido sacar provecho a Tama pues el lugar cuenta ya con un café temático de Tama, así como una tienda de souvenires.
Así las cosas no es de extrañar que se haya levantado un próspero
negocio de souvenirs (postales, llaveros, libretas, gomas de borrar…)
con la imagen de Tama en la estación de Kishi, lo que ha contribuido a hacer de él en los últimos años uno de los gatos más famosos de Japón.